Calderón

Transcripción

Isabel: Hola a todas, hola a todos. Soy Isabel Cadenas Cañón y esto es De eso no se habla.

En De eso no se habla contamos historias sobre silencios. Nos gusta decir que este es un podcast que une los puntos entre los silencios individuales y los silencios colectivos. Un podcast sobre silencios y sobre cómo los rompemos. 

Ha pasado un tiempo desde nuestra primera temporada y ahora nos toca a nosotras romper el silencio. Y queremos hablaros, precisamente, de esa pausa, de ese tiempo sin contar historias. Y también sobre cómo va a ser nuestra vuelta. 

Pero, va a hablar de ello otra persona. Alguien con quien trabajo mucho y que lleva un tiempo observando esta pausa y con la que hemos pensado muchísimo sobre cómo romper este silencio. Así que ahora le voy a ceder el micrófono a Paula Morais, que es nuestra asistente de casi todo y que en esta temporada, además, es la productora de este prólogo: el prólogo de la nueva temporada de De eso no se habla

Venga, Paula. Empezamos.

Paula: Vale, voy, venga. Yo soy Paula Morais y para hablar de esa pausa, voy a hablar de música. Yo toco el piano desde que era pequeña y hay un signo que me he encontrado en muchas partituras. Se llama calderón. Y para mí, esta pausa en el podcast tiene mucho que ver con eso, con el calderón.

¿Y qué es un calderón?

Según Wikipedia, es un signo de prolongación del sonido (o del silencio) que indica un punto de reposo. Alarga la duración de las figuras musicales a las que afecta, suspendiendo el pulso musical. 

O sea, que un calderón es una pausa o reposo que dura lo que quiera la persona intérprete.

[Música]

Yo siempre he pensado que ese momento que crea el calderón puede servir para varias cosas: Para descansar (una misma y la música), para dejar que se asiente lo anterior, para prepararse para lo que viene, para concentrarse o para mostrar el silencio.

[Música]

¿Y qué tiene eso que ver con De eso no se habla? Pues que el silencio que genera un calderón siempre se rompe, o con más música o con aplausos. Nosotras hemos estado un tiempo sin sacar episodios. Hemos hecho una pausa que ha durado lo que hemos querido. Y hablar de ello es, de alguna forma, romper nuestro propio silencio.

Así que bienvenidas, bienvenidos y bienvenides a una nueva temporada de De eso no se habla.

[Sintonía]

A principios de año, tuvimos una reunión de equipo en casa de Isabel, la directora y la voz de este podcast, para trabajar juntas las nuevas historias. 

[Isabel, Vanessa y Paula: ¡Hola! ¿Qué tal? ¿Bien, y tú? ¿Cómo estás? Bien, qué alegría…]

Habíamos hablado de la posibilidad de que yo hiciese el prólogo de la temporada, así que dejé la grabadora encendida durante toda la reunión. Estábamos haciendo otras cosas, de ahí los ruidos. Isa comía, Vanessa se cambiaba de sitio…

Isabel: Bueno, yo tengo dos cosas que deciros. ¡Feliz año! (Risas) Sí, este va a ser un gran año para nuestro equipo. (Risas)

Yo ya sabía que quería hablar del tiempo entre temporadas, de la pausa. Y durante esa reunión, de pronto, todo encajó. Les estaba contando que había hecho un podcast propio, muy personal, en el que hablaba de música y de procesos creativos. Y que me costó tanto sacarlo, que hubo una semana en la que me marqué un calderón. 

Paula: Entonces decidí sacar un episodio que era Interludio: Calderón. Y es: hoy no hay episodio largo, hay esto, porque necesito parar. 

La idea del calderón me gusta tanto que hace años, cuando me di cuenta de lo importante que era para mí esto de parar, me lo tatué en el brazo.

Isabel: A ver, déjame verlo, ¿cuál es?

Cuando lo vio, Isa lo tuvo claro.

Isabel: Paula, ¿tú sabes que Calderón es el título del episodio, no, que vas a hacer?

Paula: Ostras, sí. Ya está. (Risas)

[Música]

 

En ese momento aún no sabíamos exactamente cómo iba a ser la temporada. Yo quería hablar precisamente de ese proceso, de las nuevas historias y de la vuelta. Fue muy divertido entrevistar a Isabel, que está tan acostumbrada a estar del otro lado del micro y de la grabadora. 

Isabel: ¿Quieres que lo sostenga yo? 

Paula: ¡No! No, gracias.

Hace mucho tiempo que sacamos nuestro último episodio y podía parecer que estábamos paradas.

Isabel: Es que igual esto de que hemos parado es un poco una ficción que nos estamos contando.

Paula: Es como la versión oficial. 

Pero en realidad han pasado muchas cosas en el podcast. Las historias de la primera temporada llegaron a nuevos sitios 

[Nora Saks]: …Isabel produced in 2020 for her podcast De eso no se habla. 

Nos dieron premios…

[Presentador API]: El premio API de Periodismo de Investigación en la categoría de Periodismo Local: Una placa en mi pueblo.

Dimos charlas… 

[María Santonja]: del podcast De eso no se habla 

Seguían los eventos, la interacción con la comunidad…

[Presentadora]:  …por eso, a través de su podcast De eso no se habla

Las colaboraciones…

[Daniel Alarcón]: Estamos de vuelta en Radio Ambulante. Isabel Cadenas Cañón es escritora, creadora del podcast De eso no se habla y…. 

 

Además de lo que pasó con el podcast, en nuestras vidas también pasaron muchas cosas.

Isabel: Pues, terminamos la temporada. Un mes después, a mi hermana le diagnosticaron un cáncer. Me fui a Bilbao a estar con ella. Después de eso empecé a trabajar como productora ejecutiva de audio en El País. Y seguía muy presente, ¿no?, De eso no se habla, aunque no podía trabajar en los episodios. O sea, aunque yo estaba trabajando en otra cosa, nunca me desvinculé, 

Entrevisté también a Vanessa Rousselot, editora del podcast. 

Vanessa: En este tiempo, he tenido un hijo, he perdido a mi padre. Y luego he trabajado mucho. He tenido, como siempre, eso. Tantos trabajos como hijos. Eso se mueve por tres de cada cosa. (Risas)

También hablé con Laura Casielles, que en la primera temporada estaba al frente de la comunicación y coordinación. Para ella, este tiempo ha supuesto retomar precisamente un proyecto que estaba en pausa. 

Laura: Un libro que tiene que ver con una historia de la que también se habla muy poco, podría ser un episodio de De eso no se habla, quién sabe, igual en el futuro.

Por eso, esta temporada no va a estar en el equipo. La vamos a echar mucho de menos. 

Laura: Tuve que concederme a mí misma el tiempo de poner la energía en algo que tenía pendiente y un poco abandonado desde hace un montón de rato.

Hablando con ellas me di cuenta de que cada proyecto (personal, profesional o de cualquier tipo) tiene sus propios tiempos y pausas. A veces una melodía se reanuda justo cuando otra se detiene, pero otras veces las pausas coinciden y hay que ver cómo seguir.

[Música]

 

¿Cuánto tiene que durar un calderón?

Isabel: Yo sí que tenía una cosa de bueno, como nos escribía tanta gente, sobre todo eso, no, que la gente está esperando. Y de hecho esto lo hablaba mucho con una muy buena amiga. Me decía: Isa, la gente está esperando, pero el podcast puede salir en un año, en dos años, en tres años, o sea no pasa nada. Y ahora lo miro y tiene razón. O sea, no pasa nada. 

A veces, esa pausa y su duración no dependen solo de una misma. A veces no queda más remedio que parar.

Isabel: Pero es muy difícil. Y no sé qué quiere decir no parar. Y si, probablemente si no hubiera pasado lo de mi hermana yo no habría parado. Y habría dicho que sí a más cosas. Y no sé, no sé cómo nos hubiera ido. 

Otras veces, depende también de factores externos que afectan a cualquier proyecto independiente.

Isabel: Ojalá fuéramos tan poco precarias, que pudiéramos decir yo paro ahora porque quiero y no porque la vida me está diciendo “para”, ¿no? Y no porque de repente tengo que coger otro trabajo o tengo que irme a cuidar.

En el equipo hablamos mucho de cómo ese tiempo ha afectado, también, a las historias. Y es que el proceso de creación de un episodio no tiene una duración concreta, ni fija. Cada historia tiene su propio ritmo.

Isabel: No sé cuánto tardamos en hacer cada historia. ¿Tú lo has calculado?

Paula: No, pero… (risas)

La verdad es que no lo he calculado, pero sé que es mucho tiempo: encontrar la historia, investigarla, hablar mucho con las protagonistas sobre cómo contarla de la mejor manera posible, grabar, hacer el puzzle de la estructura, el guión, hablar más con las protagonistas… Y después está el diseño de sonido. El trabajo fino, como le gusta decir a Isa: Ajustar el ritmo, elegir la música y el momento en el que empieza y acaba, decidir cuándo meter un silencio y cuánto tiene que durar.   

[Música]

 

Así que en esta temporada, tenemos nuevas historias. Algunas han llevado mucho tiempo. 

[Mujer]: Hemos estado hace un mes y parece que nos hemos visto ayer. 

A una de las protagonistas le prestamos una grabadora hace casi dos años. 

[Mujer]: Era como que estaba con la grabadora y era como ahí era donde lo soltaba todo, sabes, como me sentía, tal. 

Otras son historias que, de repente, después de años rondando, encontraron su sitio en esta temporada. 

[Hombre]: La gente viene a pasárselo bien, no a rayarse la cabeza ni a entrar en debates. Sí, a entrar en debates también, pero no políticos.

Y nos llevaron a sitios nuevos. 

[Mujer]: ¿Es la primera vez? 

[Isabel]: Sí, la primera vez. (voces) 

Pero también muy conocidos.

[Mujer]: ¿Sería esa la cárcel donde la visitó mi madre? ¿Coincidiría con María Isabel ejerciendo en Bilbao?

Después de un calderón hay dos formas de romper el silencio: pueden venir los aplausos, cuando es el final de la obra, o puede venir más música, cuando la partitura aún no ha acabado. 

Nosotras volvemos con más historias, más silencios. Y también con cambios para esta temporada. La partitura sigue, pero algo distinta.

Por eso, esta temporada nos ha quedado muy musical. 

Nuestras historias se han expandido y ahora las contaremos en varios episodios, porque uno solo no nos alcanzaba. Nuestras dos primeras historias vendrán por parejas: dos episodios que funcionan como la cara A y cara B de un vinilo, de un mismo silencio. No son lo mismo, pero se complementan.

Otras veces, tendremos suites, como en música clásica: series de episodios sobre una misma historia.

Y hablando de música, también hemos invitado a varias compositoras a poner banda sonora a los episodios. La de este prólogo, por ejemplo, la he hecho yo. 

Y otra cosa: como puedes comprobar, hay más personas encargadas de producir las historias de esta temporada además de Isabel.

Vanessa era editora en la primera temporada y en esta también produce algunas historias. 

[Vanessa]: Lo que estoy haciendo es súper básico.

[Isabel]:  ¿Y qué tal trabajar así?

También hemos coproducido historias con otras amigas, productoras o medios amigos con los que hemos colaborado. 

[Colaboradora]: ¡Hola!

[Colaboradora]: ¡Hola! ¿Qué tal chicas?

[Colaboradoras]: Si fuera el miércoles sería hasta la una, o sea que guay…vale…a las 4, por ejemplo…

Y volviendo al tema del tiempo y del calderón, yo no sé si me habría atrevido a hacer este prólogo si la temporada hubiese salido antes.

Isabel: ¿Por qué? ¿Por qué no te atreverías a hacer un prólogo?

Paula: Porque yo necesitaba hacer mi podcast antes. O sea, esto ya no es lo primero que hago de audio, entonces eso ayuda mucho.

Eso sí, hay dos cosas que no cambian: una, que los domingos volverán a ser nuestro día de episodio .

La otra son las ganas que teníamos de volver a los micros para romper silencios.

Isabel: Yo he salido al mundo, he hecho otras cosas y he vuelto a mi podcast independiente y para mí es muy importante, ¿no? Estamos haciendo De eso no se habla otra vez, porque queremos hacer De eso no se habla otra vez. 

 

[Hombre]: Imaginate, 50 años casi.

[Mujer]: Nadie nunca me preguntó qué había pasado en ese tiempo que yo estuve fuera…

[Isabel]: ¿Yo podría grabar esto que estamos hablando? [Hombre]: No debe. [Hombre]: No, ya para eso no… [Hombre ]: No debe. [Isabel]: No, vale. [Hombre]: No me gusta.

[Hombre]: Y mandaban, los ricos mandaban. Es más, el gobierno…

[Mujer]: Tuve muchos años de “de esto no se puede hablar”, ya se acabó, ahora ya no. 

[Música]

 

Paula: Esto es De eso no se habla

Isabel: Ahora sí. El próximo domingo, empezamos. 

 

Paula: Es que esto te toca siempre a ti…

Isabel: A ver, Paula.

Paula: (risas)

Isabel: Virgen Santa

Paula: Ay, ¡no! (risas)

Jornaleros. Cara A: Rocío